Enfocamos el aprendizaje en general y el de la lectoescritura y la matemática en particular, partiendo de que no deben ser aprendizajes repetitivos y aburridos, sino, dinámicos y divertidos.
Todo aprendizaje es para la vida y por lo tanto hay que basarlo en situaciones de la vida real.
Buscamos que el niño vea la utilidad de lo que aprende, aprovechamos la realidad cotidiana como recurso fundamental de aprendizaje.